REDUCCIÓN ZONA GRASA LOCALIZADA

Hay veces que, aun estando en nuestro peso ideal, tenemos una zona de grasa localizada de la que no nos deshacemos ni con ejercicio ni con dieta. En esas zonas, las células grasas se acumulan y aumentan su contenido graso, haciendo que la circulación sanguínea sea difícil y el drenaje linfático lento, por lo que no desaparecen a pesar de nuestro esfuerzo.
Es en estos casos donde la solución viene de la mano de la aparatología estética.

CRIOLIPOLISIS (1 sesión)

Consiste en enfriar, durante un tiempo, la capa de tejido graso a una temperatura que provoca la apóptosis de los adipocitos o células grasas. A esta temperatura los tejidos circundantes no se ven afectados. Como consecuencia de esto, nuestro cerebro no reconoce a estas células grasas como propias e intenta eliminarlas.

LPG (4 sesiones)

Como ya hemos dicho, debido a la mala circulación de la zona, eliminar estas células, que son por cierto bastante grandes, es un proceso que se puede alargar mucho en el tiempo si no le ayudamos. Y es aquí donde entra en juego la LPG endermologie, que consigue a la vez, disminuir el contenido de los adipocitos circundantes y estimular la circulación sanguínea y linfática para poder eliminar cuanto antes las células grasas “muertas”.

Conclusión

Esta combinación de tratamiento es adecuada para una persona que está en su peso ideal, pero que tiene una zona de grasa localizada persistente. Mediante la CRIOLIPOLISIS conseguimos eliminar parte de esas células y mediante LPG logramos reducir el contenido graso de los adipocitos sobrantes a la vez que ayudamos a nuestro metabolismo a expulsar las células grasas apoptosadas previamente.